Familia denuncia negligencia médica que afectó a su hijo de 8 años en el Hospital de Talca

En abril de 2024, Max Mondaca Rodríguez (8 años) ingresó al Hospital Regional de Talca debido a un constante dolor de cabeza.

Tras realizarse un scanner, el resultado arrojó que padecía un síndrome llamado malformación de Chiari tipo 1.5, enfermedad que se diagnostica cuando el tallo cerebral sobresale más que las amígdalas cerebelosas, desde van desde abajo del cráneo hacia la columna vertebral.

Por lo anterior, el pequeño Max quedó internado siendo intervenido el día 15 de mayo. Sin embargo, su familia está denunciando que en el procedimiento se introdujo una sonda por su pene, que le produjo la rotura de su uretra.

En ese sentido, los padres del menor acusan una negligencia médica, por lo que solicitan un traslado a otro hospital, para recibir un tratamiento adecuado.

"Nosotros solicitamos mediación y en la audiencia solo nos señalan que lo derivarán a Santiago, sin fecha hasta el momento. Estamos preocupados porque nuestro hijo que ingresó al Hospital de Talca en abril por un operación en su cabeza, resultó enfermo en sus vías urinarias producto de una negligencia sin solución hasta la fecha", señaló la madre del niño, Ximena Rodríguez.

Además agregó: "Max está con una infección urinaria, lleva varios días, estuvo con fiebre muy alta, su orina no está con el color normal, además está con vómitos. Lo vemos con su cara diferente, está hinchado, lo vemos decaído y no come hace cinco días. No es normal lo que le pasa".

La familia del niño sostiene que esta no es la única negligencia de este tipo en el Hospital Regional de Talca, ya que también han conocido otros casos, donde pacientes han resultado con la rotura de su vía urinaria.

"No es un caso aislado y sabemos que no se dan a conocer. Estamos desesperados porque vemos que nuestro hijo se enferma cada día más, producto de las malas prácticas de los profesionales de acá", añade Rodríguez, afirmando que "el urólogo no tiene un equipo que lo respalde, está solo".

Los denunciantes sostienen que en reiteradas oportunidades han intentado hablar con la dirección del Hospital de Talca, pero "no ha sido posible". Además, sostiene que recibieron amenazas de restricción de visita por parte de funcionarios.

Actualmente, Max se encuentra con una infección urinaria producto de los meses que lleva con su cystofix (catéter), por lo que el menor tiene dificultades para orinar, lo que le produce mucho dolor.

Su familia interpuso un reclamo en el Consejo de Defensa del Estado, donde ya se efectuó una primera audiencia el día 18 de julio. En aquella instancia, se determinó efectivamente su traslado, pero sin fecha ni recinto conocido para derivar al menor.