George Harris no logró conquistar al público y terminó enfrentándose a los chilenos en Viña

A pesar de contar con el apoyo de la galería y recibir una segunda e incluso una tercera oportunidad gracias a Rafael Araneda y Karen Doggenweiler, el comediante venezolano no logró evitar las pifias y terminó enfrentándose al Monstruo.

24 de Febrero del 2025 · 00:46
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En los días previos, la posibilidad de un fracaso fue un tema recurrente, aunque en la antesala del evento se esperaba un panorama más alentador debido a la gran cantidad de venezolanos en el público. Sin embargo, George Harris enfrentó dificultades en su presentación en el Festival de Viña.

Desde el inicio de su show en la Quinta Vergara, Harris expresó su gratitud no solo hacia Chile, sino también hacia Venezuela, su país natal, ya que las banderas venezolanas predominaban en la galería. Esto llevó a que su nombre fuera coreado insistentemente en los primeros instantes.

A pesar de ello, su estilo de comedia no consiguió enganchar a toda la audiencia de inmediato, lo que se hizo evidente con la aparición de pifias entre los asistentes. Frente a esto, el comediante reaccionó y pidió respeto para quienes sí querían disfrutar de su espectáculo.

Fue en ese momento cuando Harris comenzó a confrontar a parte del público que le manifestaba su desaprobación.

“Yo no entiendo a la gente que compre una entrada para pifear toda la noche, se van a quedar sordos”, comentó al inicio.

Luego, continuó su respuesta dirigiéndose directamente a quienes lo criticaban:

“Al que no le guste, ve a comprar un refresco o una empanda. Vas a estar toda la noche [sonido de silbido] ¡Levántate a una venezolana marico! ¿Vas a estar toda la noche silbándome? ¡Por eso te vas a quedar solo hueón! ¡Te vas a desinflar! Eso no lo puedo entender, bájale, O sea, no te gusta: Ve por una refresco, besate con la polola, al pololo, haz tu momento íntimo, no entiendo, ¿Qué pasó? ¿Qué les hice? ¿Cuál es la pelea?“, expresó.

Durante su presentación, señaló a la platea baja y reconoció la presencia de lo que denominó “monstruos”, pero al dirigir la mirada hacia la galería repleta de venezolanos, agregó: “pero allá rugen”.

La "minoría" que se hizo notar

A pesar de sus esfuerzos y la ausencia de remates efectivos en sus chistes, Harris no logró desarrollar su show como esperaba. En un momento, los animadores del Festival ingresaron al escenario para brindarle apoyo.

Fue entonces cuando Rafael Araneda mencionó que existía “una minoría” que estaba en contra del comediante, aunque de igual manera lo alentó a continuar y le sugirió aumentar el ritmo de su presentación.

Luego de retomar su rutina y recibir una respuesta poco entusiasta del público, Harris llegó a expresar un suspiro: “Señor, ten piedad”, dijo en medio de aplausos dispersos.

Más adelante, ante nuevas manifestaciones de desaprobación, el comediante perdió la paciencia y volvió a dirigirse a la audiencia.

“Me da risa el que está pitando, ojalá tu tengas la carrera que tengo yo. Ojalá que la tengas. Que tengo 20 años haciendo esto y aquí en tu país, con todo lo que te da rabia, llené el Movistar. ¡Cállate!”, exclamó.

Acto seguido, lanzó un comentario con tono irónico:

“Amigo, vete un rato al baño y jálate el muñeco... ñaaaa... ñaaaa... y te relajas, te reconecta con la vida”, mientras los chistes se hacían escasos y parte del público respondía con un claro “Chao, chao, chao”.

“Bueno, bueno, bueno. ¿Qué les digo yo? Así es complicado, te lo digo. No quiero insistir en esto, porque esto es luchar contra una marea, qué lastima que ganen los malos siempre“, manifestó antes de retirarse.

Al salir del escenario, Harris intercambió comentarios con los animadores, reconociendo que “Ni Xuxa sufrió tanto”, mientras Karen Doggenweiler intentaba levantar el ánimo asegurando que “la tercera es la vencida”.

Para cerrar su presentación, intentó recurrir a la música de Puma Rodríguez y Pimpinela con la esperanza de obtener una mejor reacción, pero las pifias y los gritos de “Chao” persistieron hasta el final.

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