Mujer ciega pide extender aceras podotáctiles a todo el resto de Curicó
También destaca el equipamiento, mobiliario inclusivo y dispositivos APS en semáforos que hacen más seguro el tránsito de la gente en situación de discapacidad.
Una positiva evaluación de los primeros meses de funcionamiento del proyecto denominado “Curicó, Cuidad Inclusiva”, hizo la mujer ciega Mireya Aguilera, quien todos los días se desplaza por el centro para llegar hasta su casa. Ella asegura que, el 3% de visión que tiene, la obliga a usar un bastón de apoyo para desplazarse, y confiesa que en varias oportunidades ha sufrido caídas además de todo tipo de accidentes por la poca cultura de los transeúntes.
En conversación con el programa Sala de Prensa de VLN Radio, Mireya Aguilera, solicitó que los surcos podotáctiles ojalá se extendieran por todas las calles del centro de la ciudad. Recordemos, que la iniciativa forma parte de un proyecto piloto impulsado por el Serviu Maule, y que ya se implementó en Iquique con extraordinarios resultados.
A propósito de la 45º edición de la campaña televisiva Tetelón 2023, la mujer en situación de discapacidad acusó falta de cultura de nuestros conciudadanos para relacionarse con personas ciegas, ya que, en varias oportunidades, se ha tropezado con bultos y vendedores ambulantes no autorizados que entorpecen su desplazamiento.
Las aceras podotáctiles como las que se construyeron desde la esquina de calle Arturo Pratt y que se extienden hasta el acceso al Parque Cerro Condell, están diseñadas para que todas las personas en situación de discapacidad, puedan hacer uso pleno del espacio urbano, con todas las variables arquitectónicas y de uso cotidiano presentes en nuestra ciudad. El diseño fue especialmente desarrollado para personas con discapacidad visual disminuida.
Sin embargo, Mireya reclama que los arquitectos que han diseñado las nuevas edificaciones en el centro no piensan en las personas ciegas, al instalar cajas eléctricas o sistemas de extinción de incendios a alturas que son peligrosas para su integridad, provocando severas lesiones en su cuerpo.
La iniciativa curicana considera veredas despejadas con rebajes de poca pendiente y con pavimento podotáctil (banda de vigilancia) de alto estándar que se puede percibir hasta con zapatos gruesos de invierno. A ello se suma el uso de placas plásticas, con una guía de avance más angosta y pavimentos de alerta en el borde de la acera y calzada para advertir el peligro.
También destaca el equipamiento y mobiliario inclusivo y dispositivos APS en semáforos que hacen más seguro el tránsito de la gente en situación de discapacidad.