Tras el bombardeo llevado a cabo por Estados Unidos contra tres instalaciones nucleares en Irán, la respuesta del régimen islámico fue inmediata.
“Ahora cualquier ciudadano o militar estadounidense en la región es un blanco de guerra legítimo”, declaró un comentarista del canal estatal iraní, según citó el diario Haaretz de Israel.
En este contexto, el analista en conflictos internacionales, Néstor Siurana, señaló que el personal diplomático estadounidense en Jerusalén habría sido evacuado recientemente a través del aeropuerto de Tel-Aviv, con destino a Atenas, Grecia.
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