La vecina Lorena Azúa, oriunda de la localidad precordillerana de Potrero Grande, al oriente de la comuna de Curicó, está viviendo un verdadero drama luego que los 3 millones de pesos en efectivo que había enterrado en el piso de una leñera, resultaran dañados por el accionar de los elementos de la naturaleza, y por las inundaciones que provocaron las últimas lluvias en la región del Maule.
El caso fue revelado por un equipo local de Teletrece, quienes mostraron imágenes donde aparecen los billetes de 10 y 20 mil pesos dentro de una bolsa de plástico, totalmente carcomidos por la humedad e inutilizables. La familia había ocultado el efectivo en un hoyo que hicieron en la bodega que está detrás de su casa, como una forma de protegerlos de los ladrones, sin pensar que el remedio sería peor de la enfermedad.
“Para el temporal pasado el agua llegó hasta acá, pero nunca nos imaginamos que iba a provocar estos daños en la plata. Nuestro error fue enterrarlo ahí en el suelo, sin pensar que se podían dañar. Es una costumbre de la gente antigua de acá tener la plata guardada así, para que esté disponible ante cualquier emergencia”, confesó la afectada a la cámara del Canal 13.
En su relato a la televisión nacional, la mujer reconoció que estaba muy preocupada por la situación económica que están enfrentando como familia, ya que en zonas rurales el dinero es más difícil de conseguir, y “cuesta más ganárselo, y nosotros estamos necesitando esta plata”.
En la misma nota informativa apareció una declaración de la encargada de análisis del Banco Central de Chile, Verónica Balbontín, quien partió diciendo que, “el dinero no está perdido, y que la institución está comprometida con que las personas mantengan el valor de su dinero”, es decir, la señora Verónica podrá presentar sus billetes dañados ente el organismo emisor, el cual después de un peritaje y análisis de las piezas de papel, determinará canjear los que corresponda.
“La idea es que los puedan secar a temperatura ambiente y embolsar y que nos los traigan al Banco Central (…), ojalá no traten de separarlos, que no los manipulen, ni traten de separarlos o repararlos, solo tráiganlos, para que se puedan analizar, y eventualmente canjear” dijo la experta.