La diputada por la región del Maule, Consuelo Veloso Ávila (IND-PR), rompió el silencio tras la sesión de este martes para denunciar públicamente lo que calificó como una situación de hostigamiento y acoso reiterado por parte del diputado y actual senador electo, Miguel Ángel Becker (RN). Según la parlamentaria, los hechos se han extendido por varios años durante el presente periodo legislativo.
En una declaración pública, Veloso detalló que el asedio comenzó tras un debate en la Comisión de Mujeres y se manifestó inicialmente con acercamientos en pasillos y comentarios burlescos cuando ella se encontraba sola. Con el tiempo, la conducta escaló hacia el pleno de la Cámara de Diputados y Diputadas.
"Su conducta volvió a repetirse y entonces fue inevitable y también de toda justicia, denunciar públicamente este hostigamiento reiterado. Una cosa es la discusión política... y otra totalmente distinta es el acoso en el ambiente laboral", sentenció la legisladora.
La diputada relató que Becker utilizaba gestos, gritos y expresiones para intentar acallarla precisamente cuando le correspondía intervenir en la Sala, buscando ridiculizarla frente a sus colegas. Veloso enfatizó que decidió hacer pública la situación al constatar que el parlamentario arrastra antecedentes previos de maltrato laboral contra funcionarios y otros pares.
Ante la negativa pública de los cargos por parte del denunciado, Veloso fue enfática: “Tener autoridad es una responsabilidad y un honor, no un cheque en blanco para abusar de otros”.
La diputada del Maule anunció una ofensiva para poner fin a lo que considera una "impunidad" histórica. Como primer paso, acudirá a la Comisión de Ética, contando con el respaldo de colegas que han sido testigos de los hechos. Paralelamente, confirmó que se encuentra estudiando acciones legales adicionales.
Asimismo, Veloso hizo un llamado urgente a modificar el reglamento de la Cámara para adaptar la Ley Karin a las relaciones entre parlamentarios, advirtiendo que la creciente polarización social podría aumentar este tipo de agresiones.
"Nadie está libre de que en cualquier trabajo pueda sufrir acoso y maltrato solamente por pensar distinto, por su vestimenta, clase social o credo religioso. Esa forma de relacionarse... es lo que tenemos que frenar hoy más que nunca", concluyó en su misiva.
Finalmente, la parlamentaria agradeció las muestras de apoyo recibidas por parte de autoridades locales y vecinos de la región, comprometiendo su solidaridad con otros funcionarios que también habrían sido agredidos por el mismo parlamentario.
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