El diputado por la Región del Maule, Benjamín Moreno, expresó su más enérgico rechazo a la condena de cinco años de presidio impuesta al teniente de Carabineros Nicolás Neira Durán, quien fue procesado por el delito de tortura tras participar en un procedimiento de control de orden público en enero de 2020, en pleno estallido social.
Durante el operativo, el personal policial fue increpado por un sujeto que se negó a identificarse, intentó huir y cayó al suelo al ser desestabilizado. Fue reducido por funcionarios bajo el mando del teniente Neira. La única lesión constatada fue una fractura nasal, calificada por el Servicio Médico Legal como “menos grave”.
“El Estado no puede tratar como tortura lo que fue una actuación legítima de control en medio de una situación compleja de orden público”, señaló el diputado. “Aquí no hubo ensañamiento ni abuso, sino un procedimiento que terminó con una lesión menor. Condenar a un teniente a cinco años de cárcel por esto es una aberración. Es castigar a quienes nos cuidan”.
La causa fue impulsada por el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), cuyo rol en este y otros casos ha sido, a juicio del parlamentario, profundamente ideologizado: “No puede ser que el INDH, que tantas veces se ausenta cuando las víctimas son Carabineros, actúe como un brazo acusador contra quienes arriesgan su vida por la seguridad de todos. No hay imparcialidad, hay una persecución política constante”.
El primer juicio contra el teniente Neira fue anulado parcialmente por la Corte de Apelaciones de Santiago. Sin embargo, en 2024 un segundo proceso terminó con una nueva condena, actualmente impugnada mediante un recurso de nulidad.
“El problema aquí no es solo jurídico, es político y cultural. Hay una parte del sistema que ha decidido ensañarse con Carabineros, y eso tiene consecuencias graves: hoy muchos policías actúan con miedo, temen ser llevados a la cárcel por cumplir con su trabajo”, advirtió el diputado.
“Defender a carabineros no es justificar excesos, es defender el principio de autoridad, la proporcionalidad en la justicia y el sentido común. Lo que está ocurriendo es que, mientras los delincuentes son liberados con medidas alternativas, Carabineros terminan condenados por mantener el orden. Eso no puede seguir pasando”, concluyó.