En el hospital regional de Talca (HRT) se produjo el fallecimiento de uno de los conductores implicados en el choque frontal y de alta energía, que la mañana de este domingo se produjo en el kilómetro 84 de la Ruta J-60, a la altura de la localidad de Idahue Chico, antes de llegar a Licantén, en la región del Maule.

En ese lugar y por causas que deberán ser aclaradas por un equipo de la subcomisaría de investigación de accidentes de tránsito y carreteras de Carabineros (SIAT Talca), colisionaron frontalmente los vehículos menores placas patentes CWWF-65 y FBPF-16, resultando siete personas lesionadas de diversas consideración y donde al cabo de unas cinco horas, lamentablemente, se confirmó el fallecimiento de unos de los heridos más graves, tratándose del conductor licantenino, Jaime Esteban Tobar González, soltero de 31 años.

El otro conductor sobreviviente corresponde a Jorge René Dantón Tapia de 62 años, quien iba en compañía de Mireya del Carmen Rojas Castro de 61 años internada en Curicó, con fracturas graves pero fuera de riesgo.

En el mismo furgón marca Peugeot viajaban Francisco Javier Becerra Gaete de 38 años, Romina Minge Dantón Rojas de 33, Karina Constanza Dantón Rojas de 30 y la niña de 6 años, Lía Anais, la que era intervenida quirúrgicamente anoche en Talca, producto de las múltiples fracturas que sufrió.

Un informe preliminar del equipo de la SIAT Talca, da cuenta que uno de los conductores traspasó el eje central de la calzada, obstaculizando la normal circulación del vehículo que lo hacía en dirección contraria.

Terminado el trabajo investigativo de los peritos, el jefe de la segunda comisaría de Licantén, Mayor Luis Avilés, confirmó el fallecimiento de uno de los involucrados y dijo que no fue posible saber en qué condiciones lo hacían los conductores, ya que debido a la magnitud del choque frontal, carabineros no pudo aplicar las pruebas respiratorias.

Además, la autoridad policial se disculpó por una falsa información que recibió la institución dando cuenta de una segunda víctima fatal, lo que por fortuna no era verídico.

Señalar que el conductor fallecido Jaime Esteban Tobar González era hijo único, de una querida asistente de la educación de la escuela básica del balneario de Iloca, por lo que su trágico y repentino fallecimiento causó profunda consternación en la costa.