Secuestros en Chile: Una puerta difícil de cerrar
12 de Noviembre del 2023 · 23:03El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de VLN Radio.
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Diputado del distrito n°17 de la Región del Maule
Corría el año 2013 y me tocaba analizar diversos peritajes de carácter balísticos en el sector Sur de Santiago, donde las victimas aparte de ser muy jóvenes, vivían en barrios de alto riesgo social, pero además presentaban otro patrón común que era la gran cantidad de impactos balísticos que presentaban en sus cuerpos. El calibre 22 o .38 ya iban de salida en esos años, usándose mucho el calibre 9 milímetros y haciendo su debut la .40, el que hoy ha sido desplazado por la munición de guerra 7.62 o la 5.56 usada en Talca hace semanas atrás en un ajuste de cuentas.
Al revisar las distintas causas penales de mi trabajo, me encontré la del joven Jimmy que presentaba 7 impactos de bala, a Esteban con 15 y otro que no recuerdo su nombre con 30 impactos, siendo un habitué en el sector Sur donde de Santiago, donde trabajaba habitualmente junto a mis colegas, donde nos adentrábamos a las poblaciones a levantar indicios, rastros o huellas que nos permitieran cumplir con nuestro cometido que era establecer las trayectorias balísticas o la credibilidad de testigos que presentaban las familias de la Victima como la del Imputado.
Este fenómeno del aumento del poder de fuego y ensañamiento por motivaciones relacionadas con el tráfico de drogas, ajuste de cuentas y prostitución no tuvo un tratamiento por parte de una política pública de aquellos tiempos, menos de los distintos gobiernos que le sucedieron, ya que para ello se necesitaba un conocimiento especializadoen materias tales como Criminología, Criminalística, Sociología y otras áreas de análisis que la política nunca ha conocido o a tratado de conocer, poniendo en cargos estratégicos a personas sin competencias o buscando la aplicación de recetas que nunca han resultado o que han estado de moda en países vecinos.
Sin caer en una vereda ideológica, recuerdo viaje de políticos a Canadá para ver el trabajo en materia de seguridad pública y su aplicación en Chile, o el viaje a New York al plan tolerancia cero, donde la policía hacia uso de su arma de fuego a discreción, y para que decir con el viaje que hicieron a México donde el Ejercito y Armada patrullan algunas comunas en camionetas donde están montadas ametralladoras. Nada de lo anteriormente mencionado ha dado resultado en Chile, ya que culturalmente no tenemos una “Cultura en Seguridad” que se nos halla enseñado de la niñez, tampoco en aulas, a excepción de algunas comunas donde docente a través de juegos les enseñan a tirarse al piso a pre escolares cuando hay balaceras en sus alrededores y así no ser víctimas de una bala loca, tema que también me toco “cotizar” para una fundación de jardines infantiles que buscaban poner vidrios blindados para algunas salas.
En Chile el Crimen Organizado ya está instalado y lamentablemente en mi querida región del Maule, donde nos hemos llenado de discursos y anuncios que a la ciudadanía no convencen, ya que son los propios medios de comunicación que muestran cómo está el barrio y los nuevos delitos que ya no importamos, sino que estamos produciendo. He visitado barrios en el Maule donde el relato de desespero de vecinos por el incremento de delitos en su sector no se condice con las estadísticas positivas que muestra la autoridad de turno en conjunto con las policías.
Hoy el secuestro es la noticia, pero algo que ya estaba ocurriendo entre bandas rivales que habitualmente trafican, pero donde hoy toca a un empresario y a ciudadanos emprendedores, donde se pagan los rescates, comenzando a normalizar un nuevo delito, que se imito desde centro América y norte América. Está situación debe replantear la seguridad de empresarios, comenzar a educarse en temáticas relacionadas a este tipo de delito que por lo que se ve, llego para quedarse, en el entendido que no tenemos una política pública que garantice que esto no volverá a suceder.
Voces de “Militares a la Calle” se toman el discurso demagógico de algunos políticos y luego aparecerán la de futuros candidatos con el “populismo penal” dando cuenta que esto lo solucionan nuevas leyes. Debo una vez más defraudarlos querida comunidad, esto se combate con profesionales del área y no con políticos en cargos estratégicos, por lo que debemos una vez más seguir aferrados al factor suerte, donde en el último tiempo hemos abusado, pensando en que nunca seremos víctimas de este flagelo que es el Crimen Organizado.
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