En un hecho calificado como "inaceptable" por las autoridades, voluntarios de Bomberos de Maule fueron víctimas de una violenta emboscada mientras combatían el incendio forestal del Cerro Maule, el cual ya ha afectado más de 1.100 hectáreas.
El ataque no solo puso en riesgo la integridad de los voluntarios, sino que debilitó la logística de abastecimiento de agua en el momento más crítico de la jornada.
El incidente ocurrió cerca de las 15:00 horas del miércoles, cuando el camión aljibe Z-5 se desplazaba para recargar agua. Fue en ese entonces cuando dos vehículos menores bloquearon el paso del camión institucional en el sector "Los Patos".
Los agresores descendieron de los móviles y lanzaron piedras de gran tamaño contra el parabrisas y la estructura. Algunos individuos subieron a la unidad para cortar mangueras y dañar la motobomba, herramienta vital para succionar y entregar agua a los carros bomba que combaten el fuego directo.
"Fuimos atacados por un grupo de personas en un confuso incidente; nuestro material mayor quedó inutilizable... Nuestros bomberos no resultaron heridos de gravedad", confirmó la institución vía Instagram.
Pese a que el vehículo debió ser retirado inicialmente bajo resguardo de Carabineros, la mística de los voluntarios permitió un giro en la historia. Gracias a trabajos técnicos de emergencia realizados por el propio personal de la institución, la motobomba fue reparada de manera provisoria.
Actualmente, el Z-5 ya se encuentra nuevamente operativo, logrando abastecer simultáneamente a dos líneas de ataque en una zona donde la Alerta Roja de SENAPRED sigue vigente por la cercanía de las llamas a sectores habitados.
El delegado Humberto Aqueveque condenó el hecho el jueves 25, señalando que "no podemos permitir que los equipos de emergencia sean atacados mientras protegen vidas en días festivos".
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