"Me estoy enterando por la prensa": Hija de concejala desaparecida cuestiona gasto de recursos en búsqueda descartada
Javiera Gallegos, hija de la concejala de Villa Alegre, criticó duramente el “insólito giro” de la investigación: el equipo de búsqueda retomará rastreos en el Río Loncomilla, sector que ya había sido descartado. La joven acusa que se enteró de la noticia por la prensa y pide que se dejen de lado el “circo” y se usen recursos en tecnología.
Javiera, hija de la concejala de Villa Alegre, María Ignacia González, expresó su indignación por un “insólito giro” en la investigación de la desaparición de su madre, ocurrida hace cuatro meses. La noticia la sorprendió durante una entrevista en el matinal “Tu Día”.
El nuevo procedimiento, que se realizaría dentro de esta semana (la última de noviembre), contempla que el equipo de búsqueda retomará sus labores en el Río Loncomilla, sector que había sido investigado y descartado en un inicio.
La hija de la concejala no ocultó su frustración por la inesperada noticia, que conoció a través del corresponsal de la región del Maule, Juan Pablo Benito.
"De hecho me estoy enterando... Para nosotras no representa absolutamente nada, tenemos la seguridad que ni mi mamá ni su auto están en el río. Encuentro que a esta altura, seguir gastando dinero en eso, de verdad, es una vergüenza”, afirmó Javiera en el programa.
La joven criticó duramente a las autoridades por la falta de transparencia: “Siempre nos dejan en claro que ante cualquier cosa nos vamos a enterar antes que el resto, resulta que en más de una vez nos terminamos enterando por la prensa”.
La indignación de la familia se centra en el mal uso de los recursos. Javiera Gallegos sugirió que el dinero del Estado debe usarse en tecnología y no en el rastreo de zonas ya descartadas.
"Podrían gastar recursos en otras cosas, como programas extranjeros para poder aclarar la imagen de un video o poder hacer zoom. Lo otro es puro circo y no sé a quién están protegiendo”, sentenció.
Finalmente, la hija de la concejala lamentó el desgaste emocional y económico del proceso: “Más que esperanza o cosas buenas, me da más rabia. Han gastado no sé cuántos millones en eso”.