El director ejecutivo de la Corporación de Fomento Productivo de Curicó (Somos Pro), Boris Durán, reaccionó al explosivo informe N° 690 de 2025 de la Contraloría Regional del Maule, el cual reveló anomalías administrativas en la entidad.

El director ejecutivo fue enfático en señalar que el informe auditado no cuestiona la integridad de los fondos y desestima cualquier pérdida de dinero.

“El informe no señala ningún tipo de malversación de fondo, ni irregularidades en términos de pérdidas de dinero con respecto a estos contratos”, afirmó Durán, refiriéndose a los 310 trabajadores relacionados con el cuidado de áreas verdes y 70 auxiliares del municipio.

En ese sentido, explicó que la Contraloría está obligada a iniciar sumarios administrativos y juicios de cuentas si detectara malversación, lo que "no ha ocurrido".

“Lo señala el informe -claramente- es la forma de cómo se ejecuta (la administración), pero no el tema del dinero. No hay cuestionamiento en ese aspecto”, sostuvo.

El director ejecutivo reconoció que la principal observación del informe está relacionada con la legalidad de sus funciones: “La Corporación no debiera ser quien ejecute este tipo de contratos, sino que deberían ser otro tipo de empresas que se dedican exclusivamente a este tipo de rubros”.

Respecto a las irregularidades en adquisiciones (compras sin respaldo, por ejemplo), Durán lo atribuyó al cambio de modelo de gestión que experimentó la Corporación en 2024.

"Desde 2024 se hizo una transición de un sistema completamente privado, a uno completamente público, y hay ciertos procedimientos que nos exigía la Contraloría. Nosotros ya les respondimos”, indicó.

Ejemplificó que la Contraloría les exige formalizar procedimientos que antes no estaban en su lógica de funcionamiento, como generar un certificado interno por cada ingreso de dinero a la cuenta, en lugar de aceptar solo el certificado bancario. También mencionó que cambiaron el software de contabilidad a recomendación del ente fiscalizador para adaptarse al sistema público.

Respecto a su figuración como girador de cuenta corriente (junto al alcalde y el tesorero de la corporación), Durán aclaró que se trata de un sistema de control de pagos de sueldo y transferencias que requiere la firma conjunta de las tres personas, no de una sola.

Finalmente, sostuvo que todas las correcciones administrativas se están realizando dentro del plazo de 60 días otorgado por Contraloría y enfatizó el beneficio económico de la gestión:

“Quiero dejar en claro que nosotros como Corporación postulamos a un proceso de licitación para visar los contratos con los trabajadores, el cual fue aprobado por la municipalidad y el Departamento Jurídico. Posteriormente pasó públicamente al Concejo Municipal”.

"El hecho de que nosotros hayamos ejecutado este proceso, le ahorró 6 mil millones de pesos a la municipalidad”