Un joven de 20 años, estudiante de Ingeniería, ha sido liberado después de pasar 95 días en prisión preventiva por un delito en el que, según se ha determinado, no tuvo relación. La defensa presentó una pericia de georreferenciación que demostró que el joven no se encontraba en el lugar donde ocurrió una encerrona en Arica durante la madrugada del 20 de agosto.

Según explicó su defensa al medio LUN, esa noche el estudiante se encontraba con dos amigos en una plaza ubicada detrás del Agro de Santa María, en Arica. Permanecieron allí hasta cerca de las tres de la mañana, momento en que fue detenido sorpresivamente.

“Empezamos a escuchar varias patrullas, no sabíamos qué estaba pasando. Cuando intentamos movernos, una patrulla pasó frente a nosotros, un carabinero bajó, nos apuntó y nos detuvo sin ningún motivo”, relató el joven.

Los hechos se originaron horas antes, cuando una mujer denunció a Carabineros que tres personas la habían asaltado y robado su vehículo. La víctima proporcionó una descripción inicial y, tras una persecución, dos sospechosos fueron detenidos. Posteriormente, la víctima cambió su versión y afirmó que los responsables serían “entre cinco y seis”, lo que amplió el radio de búsqueda policial.

En este contexto, una patrulla se cruzó con el futuro ingeniero y sus amigos mientras se desplazaban en un automóvil, procediendo a su detención bajo la presunción de que formaban parte del grupo de fugitivos. “Incluso la víctima realizó un reconocimiento y por eso es que terminan en prisión preventiva”, indicó el abogado defensor Claudio González.

El joven permaneció 95 días en la cárcel de Arica. La defensa solicitó una pericia a la PDI para revisar la ubicación del teléfono celular de Cristóbal (nombre del estudiante) entre la noche del 20 y la madrugada del 21 de agosto. Esta diligencia mostró que él y sus amigos permanecieron siempre en el mismo punto.

“El informe indica que estos chicos estuvieron entre las 23.40 horas y las 03.40 horas, más o menos, en el mismo lugar. Nunca se movieron del sector. Gracias a esa pericia, que finalmente comprobó que Cristóbal jamás estuvo en el lugar del delito, los tres chicos lograron salir en libertad”, enfatizó González.