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Hijo condenado a 15 años por asaltar a su padre en San Antonio

Un tribunal dictó sentencia contra dos hombres por un robo con violencia en San Antonio. El hijo de la víctima recibió la pena más alta.

24 de Noviembre del 2025 · 21:45
Archivo

Un año y tres meses después de un violento asalto ocurrido en el cerro Bellavista de San Antonio, el Tribunal Oral en lo Penal (TOP) dictó sentencia contra los dos autores del delito de robo con violencia e intimidación agravado. El hijo de la víctima, Jason A.R.G. (21), fue sentenciado a la pena más severa: 15 años y un día de presidio.

El coimputado, el ciudadano colombiano Renny G.B.D. (26), recibió una condena de 10 años y un día de cárcel. Ambos deberán cumplir sus sentencias de manera efectiva.

El atraco tuvo lugar cerca de la medianoche del 19 de agosto de 2024. Los dos individuos, armados con armas de fuego y un fierro con punta, irrumpieron en el dormitorio de la víctima, un feriante de 50 años, para exigirle dinero. Según la sentencia del TOP, los acusados agredieron a la víctima, manifestándole que entregara el dinero y amenazándolo de muerte, indicando que tenían un sicario esperando fuera de la casa de su madre, quien es abuela de Jason.

La víctima fue trasladada al hospital Claudio Vicuña, donde se le diagnosticaron diez heridas cortopunzantes en cabeza, hombro derecho, tórax y mano, además de un traumatismo encéfalo craneano de carácter grave.

El Ministerio Público logró la condena del hijo de la víctima, Jason A.R.G., a pesar de que su padre se negó a testificar en el juicio oral en su contra y desistió de identificarlo como su agresor. El fiscal Ramón Espinosa basó su caso en los testimonios de funcionarios de Carabineros que entrevistaron al afectado minutos después del asalto. Los jueces consideraron que la participación de Jason quedó establecida con el testimonio de los Carabineros que recogieron el primer relato del ofendido en el hospital, donde “sindicaba claramente como uno de sus agresores a su hijo Jason”.

La defensa de Jason intentó obtener la absolución argumentando que la víctima no lo reconocía como atacante. Sin embargo, el TOP desestimó este argumento, concluyendo que “el resto de las probanzas fue suficiente y contundente en orden a establecer la autoría de los acusados en los hechos”.

La condena de 15 años y un día para Jason se fundamenta en la consideración de los jueces sobre el agravante de reincidencia específica, dado que ya contaba con sentencias previas por robo con intimidación.