Un repudiable hecho ocurrió durante la previa del duelo entre Curicó Unido y Ñublense en el Estadio La Granja. Minutos antes del encuentro, un camarógrafo de TNT Sports sufrió heridas y un traumatismo acústico debido al lanzamiento de fuegos artificiales.

Este incidente obligó a que la persona afectada fuera trasladada en ambulancia a un centro de atención médica para recibir tratamiento y evaluar sus lesiones. A pesar de este acontecimiento, el partido comenzó sin mayores contratiempos, y solo se emitió un anuncio a través de los altavoces.

Ante lo sucedido, el medio de comunicación emitió un comunicado condenando lo ocurrido: "Uno de nuestros profesionales nuevamente ha sido agredido por fuegos artificiales, sufriendo una seria herida en su cuerpo y un traumatismo acústico, por lo que ha sido trasladado a un centro asistencial y su estado es de reserva".

"Con decepción y preocupación vemos cómo la violencia en el fútbol chileno vuelve a ser protagonista y uno de nuestros trabajadores nuevamente ha sido su víctima", agregaron.

En esa línea, señalaron que "todo el material gráfico emitido en esta jornada, estará en completa disposición de las autoridades regionales de seguridad y orden para el análisis que corresponda, con el fin de identificar cuanto antes a los causantes de este nuevo hecho de violencia".