Un escándalo de presuntos pagos irregulares y uso de personal para fines ajenos al servicio público ha sacudido al Cementerio Municipal de Curicó. La denuncia fue realizada por el exdiputado Roberto León (exDC), quien apuntó directamente al exdirector del recinto y actual consejero regional, Roberto García (DC).
Según la acusación, García habría recibido pagos en efectivo por servicios que no fueron registrados en los libros del municipio.
La denuncia también señala que, al menos, dos funcionarios habrían trabajado en la construcción de una iglesia evangélica en Lontué, comuna de Molina, durante su horario laboral, lo que podría estar relacionado con la cercanía entre García y el pastor Mauricio Trincado, quien se desempeñó como subdirector del cementerio.
El actual administrador del cementerio, Luis Figueroa, confirmó que los antecedentes de la denuncia "ya fueron entregados al Departamento Jurídico para su revisión y análisis.
La situación también generó reacciones entre los concejales de la comuna. Francisco Sanz (RN) afirmó que solicitará "más antecedentes a la administración del cementerio para dar mayor solidez a la denuncia".
Por su parte, el concejal Mario Undurraga (UDI) sostuvo que "es necesario investigar todos los antecedentes para determinar si existe un delito de malversación de fondos públicos".
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