Margarita Gómez, residente de la localidad de Comalle en la comuna de Teno, vive momentos de profunda angustia. A principios de diciembre debe someterse a una compleja cirugía en Talca que la obligará a permanecer hospitalizada durante seis meses. Su mayor preocupación es su hija de 34 años, quien vive con sordera y tiene un diagnóstico de esquizofrenia.
Margarita no puede dejar a su hija sola durante su hospitalización, ya que requiere cuidados especiales y medicación constante para controlar sus crisis. La madre se encuentra desesperada ante la posibilidad de no encontrar un lugar adecuado para su hija mientras se recupera de la cirugía.
A pesar de haber buscado ayuda en diferentes instituciones públicas, no ha logrado encontrar un lugar que pueda acoger a su hija debido a su condición de salud mental.
Margarita hizo un llamado a las autoridades y organizaciones de salud competentes para que la orienten y la ayuden a encontrar una solución. Destaca que su hija se comunica con fluidez a través de lenguaje de señas, habilidad que aprendió en la desaparecida escuela San Daniel de Curicó.
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